El gobierno de Andrés Manuel López Obrador no tiene brújula ni orden; ni siquiera ha convocado a las personas, organizaciones e instituciones para las consultas públicas que garantizan una construcción participativa del Plan Nacional de Desarrollo, conforme a la obligación constitucional, señaló el expresidente Vicente Fox Quesada.
Entrevistado por El Economista, dijo que la mayoría que “el pueblo de México entregó a Andrés Manuel (…) ha dejado al país con muy pocos balances de poder, en un momento donde la oposición está completamente desdibujada.
“Nos queda la Suprema Corte de Justicia; nos queda cuando menos la mayoría para crear cambios institucionales en el Senado únicamente”.
Y sostuvo que mientras no surja un liderazgo interno, el arbitraje y el juicio sobre las políticas del país se mantendrán en el exterior.
“Con los mercados de dinero, con los inversionistas no se juega. Ellos sólo saben un juego que es el rendimiento del dinero y si piensa (el presidente López Obrador) que los inversionistas le apoyarán para construir el trenecito del sureste, al que él planea dedicar sólo 5% costo total, pues tiene que darles estudios de impacto, garantías de retorno. Datos transparentes que les facilite planear y proyectar”, manifestó.
—Sobre los señalamientos directos que le ha hecho el presidente López Obrador acerca de que usted estaba enterado del robo de combustible…
—El huachicoleo no empezó en mi sexenio. La administración actual está aventando culpas para atrás, aunque sabe que jurídica y legalmente no tienen ningún asidero, pero aún así las sostiene, porque le sirven por el momento en esta guerra suya, que es la guerra de AMLO contra el huachicoleo. A este señor se le antojó ir contra las administraciones anteriores, justificar su falta de resultados, acusando al pasado y a otros. Ahora es costumbre que ya agarraron también sus secretarios, culpar al pasado, lo que no pueden construir del futuro.
—El presidente de Colombia nos explicó en Davos que el robo de combustible que padecieron en su país estuvo dirigido por el crimen organizado, por el narco, ¿podría ser el caso de México?
—Tiene muchos orígenes el huachicoleo, pero reitero tajante que no inició en mi sexenio.
—Hemos visto un crecimiento de la inseguridad, crimen, violencia en manos del narcotráfico. Nos cuesta creer que inició recientemente. ¿Qué pasaba en su sexenio, que no eran tan frecuentes?
—AMLO acostumbraba hablar (de) los muertos de Peña Nieto, de Calderón. Ahora, resultado de su guerra contra el huachicol, ya tiene a los muertos de AMLO.