Dos diáconos son consagrados como presbíteros por el obispo Felipe Padilla Cardona
Los diáconos Daniel Ureña Cota y Leonardo Moctezuma Mora fueron ordenados presbíteros por el obispo Felipe Padilla Cardona, en una celebración llevada a cabo en el Templo de Nuestra Señora de Fátima la tarde de ayer.
Daniel es originario de Moctezuma, Sonora, y realizó sus estudios de filosofía y teología en el Seminario Diocesano de Ciudad Obregón, mientras que Leonardo es originario de Torreón, Coahuila, pertenece a la Congregación del Santísimo Redentor y realizó sus estudios de filosofía en el Instituto de Formación Filosófica Intercongregacional de El Salvador y teología en la Universidad Pontificia de México.
El primero será sacerdote diocesano y el segundo será sacerdote de tipo religioso.
En la homilía el obispo les pidió replicar la acción maravillosa que Dios ha tenido con ellos al elegirlos, con todo el pueblo y las diferentes comunidades en donde les toque servir.
“El evangelio los invita a ser granos de sal, que la humildad los embargue los llene y que todo servicio esté compenetrado con la humildad porque solo con humildad se puede dar sabor y sentido a las acciones”, resaltó.
Padilla Cardona también les pidió tener siempre presente el amor de Dios que los eligió para este ministerio y al que desde jóvenes supieron responder con generosidad sabiendo que se trata de un servicio de entrega total en favor, principalmente, de los más necesitados.
Los nuevos sacerdotes hicieron sus promesas de obediencia a sus superiores y posteriormente se postraron para pedir la intercesión de todos los santos de la Iglesia Católica.
Luego fueron revestidos con la estola y casulla propia de los presbíteros, les fueron ungidas las manos e impuestas las manos para terminar así con el rito de ordenación y darles la bienvenida de manera oficial al presbiterio de la Iglesia.
Al final de la celebración el obispo informó que el padre Ureña Cota iniciará su ministerio como vicario del Santuario de Guadalupe y el padre Moctezuma Mora continuará sirviendo en el templo de Nuestra Señora de Fátima, en Ciudad Obregón.