En México, la discusión sobre la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales ha generado expectativas y dudas sobre quiénes serían los beneficiarios directos en caso de que esta reforma sea aprobada.
A continuación, se detallan los grupos de trabajadores que podrían no acceder a este beneficio:
Trabajadores con jornadas menores a 8 horas diarias: La propuesta de reducción de jornada laboral beneficiaría principalmente a aquellos empleados que actualmente trabajan al menos 8 horas diarias.
Esto significa que los trabajadores con jornadas fijas de menos de 8 horas al día no verían modificada su carga horaria semanal si la reforma se aprueba como está planteada.
Trabajadores con jornadas de menos de 6 días a la semana: Otro criterio clave para recibir los beneficios de la reducción sería laborar seis días a la semana.
Aquellos empleados que trabajen cinco días semanales, independientemente de las horas diarias, podrían no ser elegibles para la jornada laboral de 40 horas semanales si la reforma se estructura según lo propuesto por Susana Prieto Terrazas.
¿Cómo va la reforma de la reducción de la jornada laboral en México?
La iniciativa presentada por la diputada Susana Prieto Terrazas busca modificar tanto la Constitución como la Ley Federal del Trabajo para establecer una jornada de 40 horas semanales, asegurando al menos dos días de descanso remunerado.
A pesar de haber sido presentada en 2023, la propuesta ha enfrentado obstáculos significativos en su camino legislativo.
En octubre de 2023, el dictamen inicial no fue aprobado por la Cámara de Diputados, lo que provocó un retraso en su progreso. Sin embargo, a fines de noviembre, la Comisión de Puntos Constitucionales logró aprobar el dictamen para su discusión en el pleno legislativo.
Se espera que durante el transcurso del año 2024 pueda ser aprobada definitivamente y posteriormente implementada gradualmente en las empresas.
¿Cuál es el objetico de la reducción de la jornada laboral?
El objetivo principal de la reducción de la jornada laboral es mejorar las condiciones de vida de los trabajadores mexicanos, promoviendo una mejor calidad de vida y equilibrando las exigencias laborales con el descanso necesario.
Aunque la propuesta ha recibido un amplio respaldo entre los trabajadores, la falta de consenso y el influjo de intereses políticos y empresariales han contribuido a los retrasos y desafíos legislativos que enfrenta actualmente, dijo Prieto.